La Justicia de San Isidro condenó este mediodía a 17 años de cárcel a un cura párroco que llegó a juicio acusado de abusar sexualmente de cinco chicas en el comedor de una iglesia de la localidad de Pilar. El fiscal Washington Palacios había reclamado 35 años de prisión para el sacerdote, identificado como Mario Napoleón Sasso.
El cura estaba imputado de haber violado a cinco chicas, cuando tenían 7, 9, 10, 11 y 14 años. Todo ocurrió en el interior de la capilla de La Lonja, donde el sacerdote tenía un comedor infantil. La investigación contra Sasso contó con el apoyo de la monja Martha Pelloni, que incluso organizó una colecta de firmas -150 de sacerdotes y 4.000 entre laicos- denunciando el hecho y las entregó al Nuncio Apostólico.
El sacerdote fue detenido en enero de 2004 tras la denuncia de una nena. Estuvo prófugo por un mes y medio, y entonces comenzaron a investigar si había cometido otros abusos. El sacerdote se había rapado la cabeza y se había afeitado la barba. La detención se produjo poco después de que el sacerdote regresara de Paraguay, donde estuvo escondido diez días.
Después de ordenarse su captura, el 1 de diciembre de 2003, el sacerdote dejó de asistir a la capilla de La Lonja, donde estaba asignado desde noviembre de ese mismo años, luego de que trascendiera la denuncia en un programa de televisión.